FILOSOFÍA Y CARRETERA
Hola amigos, mi nombre es Lucas y os saludo desde el interior de mi querida Fiat Scudo. Aquí suelo pasar muchos ratos leyendo y estudiando Filosofía.
A través de este Blog iré transmitiendo mi experiencia relacionada con esta nueva etapa de mi vida, en esta bella ciudad que es Valladolid.
A modo de inicio contar que el estudio ha sido una constante en mi vida. Muy joven me interesé por el arte y en concreto por el dibujo y la pintura, interés que creció nada más cruzar la puerta que daba acceso al estudio del que fue mi maestro durante unos años, Don Juan Gallargo, un sevillano que tras vivir la bohemia en París se estableció en Mallorca. Su estudio estaba plagado de lienzos inacabados que expedian un fuerte olor a trementina, otros, ya firmados y con barniz que estaba destinado a retener los colores. Unos colores que cautivaron mis pupilas y que me empujaron al estudio y práctica de la pintura. Durante los siguientes veinte años se convirtió en mi principal oficio, período que compaginé con la Universidad. Inicié los estudios de licenciatura en Geografía e Historia. En segundo curso tuve una asignatura sobre la Historia de la Filosofía, asignatura que me atrapó desde el minuto cero, provocando que ese mismo curso, cambiara al Grado en Filosofía. Durante varios años me esforcé en el estudio y por fin pude finalizar el Grado. A continuación me planteé realizar el máster en secundaria porque, entre otros motivos, me encantaría transmitir mi pasión por el estudio, el arte, la lectura, la escritura, y, como no, por la Filosofía.
Espero sea de vuestro agrado mi pequeña introducción en esta aventura. También invitaros a seguir compartiendo este blog, donde próximamente expondré un aspecto muy interesante sobre la relación entre Filosofía y su forma peculiar de aprendizaje.
Adeu amics
Lucas, tal como te he comentado en privado, además de ayudarnos a estructurar el pensamiento espero de un filósofo-profesor que sugiera... y, de pronto, tengo ganas de conocer más de Juan Gallargo o de las vistas desde tu Fiat Scudo. Gracias por el regalo de leerte.
ResponderEliminarGracias, colega. Juan fue un maestro de los que te dejan huella.
ResponderEliminarY gracias a todos por compartir vuestras experiencias.
Eliminar¿Qué tal la vida bohémica en París? :)
ResponderEliminarPor desgracia, o suerte, según se mire, no viví ese período de la bohemia parisina. A mi me tocó otra "bohemia", la de la transición a nuestra democracia en la que se oía sólo una palabra: libertad. en eso coincidía con la de París aunque a algunos, en estos lares, se les iba la mano con la absenta y el opio :)
EliminarJaja has tenido suerte de vivir en París
ResponderEliminar